- Seleccionar adecuadamente el producto, refrigerarlo a la temperatura recomendada y preparar la carne de conejo siguiendo unos sencillos consejos te ayudará a evitar intoxicaciones alimentarias.
- Las intoxicaciones alimentarias se producen por el consumo de alimentos contaminados por microorganismos o sustancias tóxicas. Las características fisicoquímicas de la carne pueden favorecer la multiplicación de gérmenes patógenos.
Preparar la carne de conejo correctamente no sólo es fundamental para lograr el mejor sabor y textura, también es importante para poder consumirla de forma segura y manteniendo todas sus propiedades nutricionales. ¿Sabías que las carnes son más susceptibles a la contaminación por microorganismos capaces de causar intoxicaciones alimentarias?
Concretamente, la carne cruda puede contener microorganismos nocivos (bacterias, virus, toxinas). Para eliminar esas posibles bacterias y/o evitar su aparición, es importante refrigerarla y cocinarla correctamente. Asimismo, debes prestar atención a ciertos aspectos en el momento de la compra. Con nuestros consejos para preparar la carne de conejo podrás comer este delicioso alimento con todas las garantías.
Presta atención en la compra
A la hora de comprar carne de conejo en tu establecimiento de confianza, hay dos parámetros que determinan su frescura. Estos son el color blanco-rosado de su piel y la flexibilidad de la zona inferior. Si vas a comprar el producto envasado, presta atención también a la fecha de consumo preferente o caducidad, así como a las características del producto.
Aspectos como el origen, el contenido en agua, el tipo de procesado o el envasado pueden favorecer la multiplicación de gérmenes patógenos. Por ejemplo, si el envase no está en perfecto estado, el alimento podría venir contaminado por falta de higiene o contaminación cruzada. Por último, atento al mantenimiento a temperaturas inadecuadas.
Una correcta refrigeración es esencial
Es importante mantener la carne de conejo a la temperatura y en el envase adecuados para garantizar su buen estado, frescura, seguridad alimentaria y calidad. De lo contrario, podrían crecer bacterias que arruinen el producto. Desde AESAN señalan que la carne de conejo debe guardarse en el refrigerador a una temperatura de 2 a 4 grados. El lugar ideal es la balda inferior de la nevera, por encima del cajón.
También puedes congelarla si no la vas a consumir en los tres días siguientes a la compra. Para ello, utiliza papel de aluminio o papel encerado, así como una bolsa especial de congelación. La temperatura correcta, según la OCU, es a -18ºC. Lee todos nuestros consejos para refrigerar correctamente la carne de conejo.
Consejos para preparar la carne de conejo
Llega el momento de ponerse a cocinar ¿Tienes congelada la carne? Mejor sácala el día de antes y déjala 24 horas en el refrigerador. Si te ha pillado el toro, entonces usa el programa ‘descongelar’ del microondas. Nunca la descongeles a temperatura ambiente ni en agua, ya que así favoreces el crecimiento de bacterias.
Si la tienes en la nevera, puedes sacarla unos minutos antes para que se atempere, pero mantenla en su envase original. Antes de preparar la carne de conejo, lo primero es lavarse bien las manos y todos los utensilios que vayamos a utilizar. En especial, la tabla donde la vayas a cortar y el recipiente que vayas a utilizar para poner la carne cruda. Evita que entre en contacto con otros alimentos.
Una vez en el fuego, la carne debe superar temperaturas de al menos 75 ºC en el centro de la pieza para cocinarse con seguridad. Te darás cuenta de que se alcanza esa temperatura cuando vaya desapareciendo el color rosáceo de la carne. Si se trata de un producto envasado, sigue siempre los consejos que aparecen en el envoltorio, así minimizarás todos los riesgos.
Prestar atención a la fecha de caducidad, una correcta refrigeración y preparar la carne de conejo a la temperatura adecuada te ayudarán a evitar intoxicaciones alimentarias.
Con estos consejos para preparar la carne de conejo, reducirás al mínimo las posibilidades de una intoxicación alimentaria. ¿Ya tienes pensado cuál es el plato que vas a preparar? Si necesitas algunas ideas, siempre puedes echar un vistazo a nuestro recetario.