Cómo la carne de conejo puede ayudar a mejorar el sistema inmunológico

  • El cuidado de nuestro sistema inmunológico es vital para la salud del organismo. Mediante unos hábitos de vida saludables y una alimentación equilibrada y variada, es posible mantenerlo en plena forma.

 

  • La carne de conejo nos aporta muchos de los nutrientes necesarios para mantener sano el sistema inmunitario, tales como vitaminas B6 y B12; minerales como el zinc o el hierro; y proteínas de alto valor biológico.

El sistema inmunológico es una red compleja e integrada de células, tejidos y órganos cuya función principal es proteger a nuestro organismo de sustancias que considera dañinas o extrañas. Este tipo de sustancias son los antígenos, moléculas presentes en microorganismos, alérgenos y agentes tóxicos. Nuestro sistema las reconoce como ‘extraña’ o ‘no propia del cuerpo’ y reacciona para defenderse. ¿Sabías que la alimentación es clave para mantener fuerte tu sistema inmunitario?

 

Como ponen de relieve diversos estudios, la ingesta de las cantidades óptimas de diferentes nutrientes es fundamental para garantizar la síntesis de diferentes factores y mediadores de este sistema; así como para promover la proliferación de las células inmunitarias. En este artículo lo vamos a analizar en detalle y vas a descubrir cómo muchos de ellos están presentes en la carne de conejo.

¿Qué nutrientes fortalecen el sistema inmunológico?

Según el estudio ‘Importancia de la nutrición en la defensa inmunitaria’ llevado a cabo por diversos miembros del Departamento de Nutrición y Ciencia de los Alimentos de la Facultad de Farmacia de la Universidad Complutense de Madrid, la deficiencia de ciertos nutrientes está relacionada con un aumento del riesgo de padecer algunas enfermedades infecciosas, patologías autoinmunes y alergias.

Papel de la carne de conejo en el sistema inmunológico
La carne de conejo contiene nutrientes como proteínas, minerales y vitaminas que ayudan a mantener fuerte tu sistema inmunológico en todas las edades.

Asimismo, dichas deficiencias pueden implicar el agravamiento de otras patologías, sobre todo, aquellas relacionadas con el aumento del estado inflamatorio. Por ese motivo, manifiestan la importancia de ingerir las cantidades adecuadas de una serie de nutrientes y compuestos bioactivos, muchos de los cuales puedes encontrar en la carne de conejo:

 

 

  • Micronutrientes, entre los que destacan las vitaminas A, B6, B12, C, D, E, ácido fólico (B9) y biotina (B7); y los minerales como el zinc, hierro, selenio, magnesio y cobre.

 

  • Compuestos bioactivos, especialmente los probióticos, polifenoles, proteínas (lactoferrina), péptidos bioactivos y carotenoides.

Importancia de una alimentación equilibrada para mantener las defensas

La alimentación es esencial en el mantenimiento de un sistema inmunológico fuerte y, por ello, debe ser lo más equilibrada y variada posible. Solo de esta forma es posible alcanzar los requerimientos de los nutrientes antes mencionados. Como señala el estudio mencionado, una ingesta que incluya las raciones recomendadas por las guías alimentarias para cada grupo de alimentos es clave en este aspecto.

 

Adicionalmente, existen ciertos grupos de alimentos a los que se debe prestar especial atención. Entre ellos están:

 

  • Las carnes blancas, como la carne de conejo, destacan por su contenido proteico.

 

  • Los alimentos frescos de origen vegetal, como legumbres, cereales, frutas y verduras, que tienen un elevado contenido en fibra, micronutrientes y compuestos antioxidantes.

 

  • Los pescados azules, muy ricos en Omega-3.

 

  • Los lácteos, poseen una gran cantidad de nutrientes.

Un sistema inmunológico fuerte comienza con una buena alimentación. La carne de conejo contiene numerosos nutrientes esenciales que ayudan a tus defensas.

El rol de las proteínas animales en el sistema inmune

Las proteínas de origen animal aportan al organismo todos los aminoácidos esenciales que forman las proteínas necesarias en determinados procesos del organismo.

Es decir, al ingerir, por ejemplo, carne de conejo que cuenta con aminoácidos esenciales (lisina, metionina, valina, etc), tu cuerpo los digiere y los descompone para construir sus propias proteínas con las que:

 

  • Regulan el crecimiento.

 

  • Mantiene el sistema inmunológico.

 

  • Repara los tejidos corporales.

 

  • Se encarga de la producción de hormonas y enzimas.

 

  • Contribuye a la producción de neurotransmisores básicos para la salud mental y emocional.

 

Por tanto, si bien podemos encontrar proteínas de origen vegetal y de origen animal, estas últimas son las que se consideran de alto valor biológico.

Tips para fortalecer tu sistema inmunológico

Seguir una dieta equilibrada y variada es esencial para tener un sistema inmunológico fuerte. Sin embargo, lo ideal es acompañarla de unos hábitos de vida saludables para que nuestras defensas estén en plena forma. Algunas de las recomendaciones que nos hacen desde Quirón Salud son:

 

  • Hidratarse correctamente, bebiendo al menos dos litros de agua diarios.

 

  • Practicar ejercicio de forma regular.

 

  • Descansar correctamente, con una media de sueño diaria de entre 7 y 9 horas en adultos.

 

  • Controlar el estrés, recurriendo a técnicas de relajación si es necesario.

 

  • Exponerse moderadamente al sol por los beneficios de la vitamina D.

 

  • Evitar el consumo de alcohol y tabaco.

 

 

  • Seguir una higiene adecuada.

 

Ahora que ya tienes las claves para cuidar tu sistema inmunológico y que sabes que muchos de los nutrientes que permiten mantenerlo en forma se encuentran en la carne de conejo ¡Es hora de que la pruebes! Gracias a su versatilidad en la cocina y sus propiedades organolépticas, puedes prepararla de muchas formas diferentes y junto a múltiples ingredientes.

 

La información proporcionada en este artículo es solo para fines informativos y no debe considerarse un sustituto del consejo, diagnóstico o tratamiento médico profesional. Consulta a tu médico u otro profesional de la salud cualificado ante cualquier pregunta que puedas tener sobre una condición médica o tratamiento.

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